Y una buena cena para coger fuerza para al día siguiente, hacernos una rutita hasta el famoso pueblo de Tresviso... La llamada "Ruta Urdón", todo subidita.
Bueno, 8:00 am. Empezamos la subidita, la cual tiene un desnivel positivo de casi 1.000m en unos 8 km... eso dicen.
El camino es precioso, "to p´arriba", "to p´arriba"... me da que vamos a disfrutarlo.
Mientras Espi y Fernandisco van paseando tranquilamente y disfrutando del maravilloso paisaje, a mí me da por correr, subo y bajo, subo y bajo, subo y bajo... debía de haber sido el cafe doble que me tomé para desayunar.
La subida es brutal, el camino precioso, el tiempo perfecto... disfrutando.
¡Madre mía!... esto es maravilloso... Yo corriendo, Espi refrescándose y Fernandisco retratando el momento...
Y... llegamos a Tresviso, ese pueblecito maravilloso que nos recibe con un camino como el del "Mago de Oz" y donde nos espera una cervecita bien fría para reponer fuerzas.
Después de disfrutar de un descansito, una mañana con un tiempo perfecto, toca bajar de nuevo hasta el camping, donde nos esperan...
Pabote, Susana y la Pabotina (que esta jugando por los alrededores)... ¡qué buena gente, qué buenos momentos!...
Después de unas cervecitas, las presentaciones y un descanso... nos ponemos con la barbacoa para disfrutar de un cena de "lujo" patrocinada por Susana, que siempre se encarga de todo y es la anfitriona de estas increíbles cenas.
La bota de vino nos posee... entra como agua de mayo... la Pabotina nos hace muecas...
La bota de vino... la bota de vino... nos posee... FIN
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