XXXIII MARATON 42km EN 3:46:27

De nuevo llegaron los 42 km de Madrid, un reto que nunca dejaré de hacer mientras el cuerpo aguante... Nos levantamos por la mañana y cuando vimos el buen día que hacía, Olga y yo nos miramos y dijimos " ¿nos vamos de paseo por Madrid?" Así que dicho y hecho, a las 9 de la mañana empezó todo, pistoletazo y adelante, vamos de nuevo a hacernos esos 42 km.


Salimos con una fuerza tremenda después de media hora de estiramientos, un solecito bien majo, aunque con amenazas de bastante calor.


Kilómetro 16, seguimos llenos de fuerza, el sol pega, pero las ganas de seguir adelante pueden más que nada, seguimos frescos, pero sabemos que aún nos quedan 26 kms... Esto es una pasada, todo Madrid cortado para nosotros.


Km 33, el punto clave, donde Raulillo y Espi, nos esperan con nuestra dosis de energía embotellada, de sandía y naranja, lo esperamos como agua de mayo. El calor aprieta y las piernas empiezan a fallar un pelín, pero la cabeza la tenemos al 100%, las cogemos y seguimos adelante, ya sólo nos quedan 9 kms. Esto está chupado.


La llegada a meta fue increíble, en el km 42 justo antes de llegar, salta Carlitos (abajo a la izquierda) coge de la mano a Olga y después a mí, y entramos los tres juntos... SIMPLEMENTE LA OSTIA... Lo hemos logrado de nuevo.


Gracias Olga, por tirar de mí hasta el km 25 y dejarme tirar de ti hasta el 42. Somos un equipo perfecto... Esto no ha hecho nada más que empezar, el 19 de junio tenemos nuestro mayor reto del año, la carrera de los 100 kms.


MIL GRACIAS A:
ESPI: por estar siempre a mi lado en todo momento, por seguirnos durante toda la carrera, eres increíble, soy afortunado por tenerte, de corazón te lo digo.
RAULILLO: por dormir en tu casa, llevarnos, traernos, estar con Espi en toda la carrera... Por todo amigo, por todo, no tengo palabras que puedan expresarlo, eres la OSTIA amigo, la ostia.
JESUS, MERCEDITAS, CARLOS Y LEIRE: por darme la alegría de veros en el km 42 y dejarme entrar con Carlos hasta meta. !Qué pasada¡ el año que viene le toca a Leire, palabra de honor.
ARACELI, mi madre, por aplaudiendo y esperándome en meta. La mejor madre del mundo.
ALBERTO, mi liebre amiga, por darme suerte antes de la carrera.
ORUSCO, el puto amo, no falta ningún año, siempre en el Km 10, que tío... te veo el año que viene FIJO

PD: NO DEJARÉ DE CORRER HASTA QUE ME REVIENTE EL CUERPO